La fonación es un proceso complejo que consiste en la emisión de la voz, y es llevada a cabo principalmente por varias estructuras del aparato respiratorio y la laringe.
Además de las estructuras antes nombradas, muchos músculos actúan en la voz a través de su efecto en la articulación, que es llevada a cabo por las estructuras de la boca.
Mientras que muchas de esas estructuras están fuera del alcance de la terapia manual, las más externas sí pueden ser tratadas a través de varias manipulaciones y masajes.
Por lo tanto, en tratamientos de fonoaudiología, puede ser muy útil la aplicación de terapia manual en las estructuras de cuello y cabeza, para facilitar la relajación y el correcto funcionamiento de las mismas.
Posición de la musculatura
Podemos organizar estas estructuras de manera general en 4 grupos:
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La musculatura anterior del cuello, siendo más prominente los esternocleidomastoideos.
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La musculatura lateral del cuello, se encuentra a los lados del cuello por debajo del esternocleidomastoideo.
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Musculatura posterior del cuello, cubre las vértebras y es más voluminosa.
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Musculatura de la mandíbula, se encuentra alrededor de la mandíbula.
Tratamiento
Al tratar la musculatura anterior es importante tener especial cuidado en la presión aplicada, ya que estos músculos cubren estructuras delicadas del cuello y son sensibles a la presión. El músculo diferente al resto es el esternocleidomastoideo (va desde el esternón hasta la apófisis mastoides, debajo de la oreja), éste tiene mayor tamaño y es el más externo, por lo que se puede aplicar puntos gatillo y masajes más profundos sobre él.
La musculatura lateral responde muy bien al estiramiento (llevando la cabeza hacia el lado contrario) pero también puede masajearse levemente.
La musculatura posterior puede tratarse con mayor intensidad ya que es más voluminosa y no es particularmente sensible y también responde exitosamente al estiramiento (llevando la cabeza hacia adelante). Es importante para su relajación, trabajar también sobre la espalda alta, ya que la tensión de espalda y hombros suele trasladarse de manera ascendente hacia el cuello.
Por último la musculatura de la mandíbula puede masajearse a los costados de la misma, desde delante del oído hasta el ángulo de la mandíbula. Responde muy bien a puntos gatillo.
A modo general puede también masajearse sobre la boca (mejillas y alrededor de los labios) y estirar el cuello en todas las direcciones intentando siempre evitar el dolor intenso.
Otras consideraciones
La mayor parte de la tensión sostenida de los músculos antes mencionados tiene orígenes posturales, por lo que es importante evaluar la postura para determinar si existen alteraciones en la transmisión de la tensión muscular, principalmente en la cadena posterior.
La musculatura mandibular es particularmente susceptible al estrés psicológico, frente a una situación de estrés, es usual que se tienda a tensar la musculatura mandibular, generando entumecimiento en la misma y pudiendo ocasionar bruxismo. Relajar éstas estructuras antes de dormir y ejercicios de respiración pueden ayudar a prevenir o disminuir esas alteraciones.
Masticar chicle excesivamente puede empeorar la tensión de cuello y mandíbula, pero con menor frecuencia puede ser beneficioso.